Los vecinos de la avenida Ferroviaria de Quillacollo exigen a la Asociación Accidental Tunari (AAT) garantizar los recursos económicos para construir un colector pluvial para evitar que los trabajos del tren causen inundaciones.

Los afectados aclararon ayer que no se oponen a la ejecución de la línea verde del tranvía, pero solicitan que la empresa o la Unidad Técnica de Ferrocarriles (UTF) solucione el problema técnico que se generó por la elevación de 40 centímetros la plataforma del tren.

“El año pasado nos hemos inundado, los trabajos del tren han convertido esta zona en una especie de represa, no sabíamos por dónde desfogar, toda el agua del centro se acumula en este lugar, es terrible”, indicó el representante del Comité del Control Social del proyecto y vecino del área, Roberto Escobar.

Otro vecino relató que se vio en la necesidad de construir muros de contención para impedir que el agua ingrese al interior de su vivienda.

En tanto, otro afectado contó que varios cuartos de su casa se comenzaron a rajar por las inundaciones que ocasionó la elevación de la plataforma en este sector.

Escobar señaló que en la época de lluvias los vecinos tuvieron que desfogar las aguas por un tramo, ubicado entre la avenida 6 de Agosto y San Martín, aprovechando que todavía las obras civiles no están concluidas.

Los afectados aseguraron que se requiere 7,4 millones de bolivianos y explicaron que antes de la construcción de la vía férrea no se registraban inundaciones de magnitud.

Por su parte, el secretario de Planificación de la Alcaldía, Wilbert Oporto, dijo que se planteó el emplazamiento de un colector para liberar esta área de trabajo.