Con base en el Parque Industrial Olavarría y 45 años de trayectoria, y especializada en diseñar y fabricar productos para que otras empresas industriales no liberen polvo en el medio ambiente, tres ejes definen a RM Seguridad Ambiental: la creación de productos de alta tecnología y eficiencia; el servicio de mantenimiento al cliente; y el cuidado de las normas de calidad y seguridad e higiene.

Con la provisión de servicios que incluyen las últimas tecnologías a nivel mundial y altos estándares de calidad, la empresa olavarriense RM Seguridad Ambiental es un ejemplo de adaptación a los avances de la industria en las últimas décadas, lo que le ha permitido convertirse en una referente en brindar soluciones a empresas de la Argentina y de países vecinos.

Instalada en el Parque Industrial Olavarría (PIO), la empresa fabrica productos para que otras empresas no liberen polvo al medio ambiente, y en algunos casos que logren recuperarlo o reutilizarlo como combustible, abarcando a industrias mineras, cementeras, siderúrgicas, químicas, petroquímicas, cerealeras y toda la amplia esfera que incorpore filtros de desempolvado. Además, RM Seguridad Ambiental realiza también la instalación de sus productos y se encarga de su mantenimiento.

De acuerdo con las necesidades de cada cliente, RM Seguridad Ambiental se especializa en la fabricación de mangas para filtros (que se encuentran entre el generador de humo de una fábrica y el medio ambiente); juntas de expansión y dilatación para aislamiento térmico y acústico; mangas de carga/descarga a granel; venta de tejidos aerodeslizadores para transporte neumático; y accesorios como canastos, cartuchos filtrantes, válvulas abrazaderas y secuenciadores.

Con una historia que se remonta a fines de la década de 1970 con una pequeña empresa dedicada a la seguridad industrial ubicada sobre la avenida Colón y fundada por Rodolfo Magnaterra, RM Seguridad Ambiental con el correr de los años encontró un nicho en el sector industrial de la mano de los avances normativos vinculados al cuidado del medio ambiente, que le permitieron un gran crecimiento. Actualmente, la empresa tiene distintas unidades que le permiten brindar un servicio integral a sus clientes: el taller textil, el taller metalmecánico, los depósitos, la logística (que incluye flota de camiones), departamento técnico, control de calidad, laboratorio, y grupos de trabajos de instalación y de mantenimiento en las empresas a las que proveen servicios en todo el país.

Los propietarios de RM Seguridad Ambiental son Sergio Corso y Luciano Vallejo. Corso, que es ingeniero industrial y docente universitario, lleva adelante las tareas de desarrollo, comercialización y administración, pero afirma que Vallejo "es el alma máter de toda la parte técnica de la empresa, siendo un referente en todo el país". Ambos además poseen otra empresa también ubicada en PIO: PCM (Proyecto, Construcción y Montaje), dedicada a la fabricación de construcciones civil y metálicas y desarrollo de proyectos de ingeniería, y servicios de mantenimiento y montajes industriales, y que se complementa con RM Seguridad Ambiental (con PCM, por ejemplo, también fabrican filtros para las empresas industriales). Para definir a ambas empresas, Corso utiliza tres palabras: "pasión, entusiasmo y vocación".

Al analizar la evolución de RM Seguridad Ambiental, Corso señala que "en 2007 producía las mangas para empresas cementeras, aunque en pequeño volumen. Pero desde ese momento se comienza con una expansión de los servicios y de los tipos de industria que abarca, la que llega hasta hoy. Un paso clave fue el traslado en el año 2011 a su actual predio del Parque Industrial Olavarría I, en un primera etapa con el taller textil original y la administración, y luego construyendo dos galpones más: uno específico para la parte metalmecánica, y el otro mixto y que funciona como depósito. Además en el PIO V tenemos otro galpón y oficinas".

La compañía se enfoca principalmente en brindar soluciones tanto efectivas como eficientes que mejoran la competitividad de las industrias y minimizan su impacto en el medio ambiente. A través de sucesivas expansiones ha logrado abarcar todos los ámbitos de la industria nacional e incluso de países vecinos, como Uruguay, Paraguay y Bolivia. Sergio Corso señala que "con RM somos los únicos en el país que atendemos a Aluar (empresa productora de aluminio); en acero tenemos como clientes a Siderar y Acerbrag, con contrato de exclusividad; en cemento, a Loma Negra, Cementos Avellaneda, Holcim y PCR, es decir que todo el cemento nacional lo atendemos nosotros y también exportamos algo; en cerámica, Cerro Negro; en alimentos estamos con Unilever y con Molinos (que son servicios más chicos porque no son tan generadores de polvo); y también atendemos aceiteras y cerealeras (Cargill)".

La materia prima con la que RM fabrica sus productos (mangas y juntas) son telas textiles industriales desarrolladas en Alemania, que se caracterizan por ser ultralivianas y de gran resistencia. Pero en un claro ejemplo de integración vertical, RM no sólo diseña y fabrica los productos a la medida de sus clientes, sino que también realiza su instalación y su mantenimiento (con el desarrollo de proyectos "llave en mano"). Corso indica que "atendemos toda línea completa, no hay ninguna empresa así en el país. Porque hay empresas especializadas en cada nivel, pero no hay ninguna que dedique a todos ellos juntos. Nosotros tenemos tres ejes: la creación de productos de alta tecnología y eficiencia; el servicio de mantenimiento al cliente; y el cuidado de las normas de calidad y seguridad e higiene".

Corso explica que en 2015 la empresa obtuvo la norma ISO 9001, que "es una garantía de calidad. Con ella tenemos la calidad certificada, es decir que todos los procedimientos para conseguir nuestros producto están certificados y auditados, lo cual se nos hace periódicamente". En sus instalaciones, RM Seguridad Ambiental también posee un laboratorio para el desarrollo de sus productos. Corso cuenta que "actualmente tenemos avanzado un proyecto de ampliación del laboratorio que implicará la instalación de una planta piloto donde podrán realizarse simulaciones de situaciones reales para filtración (similares a los túneles de viento de la industria automotriz), con un concepto traído desde Europa y la cual será única en el país".